Últimamente la gente dice que Marta está muy guapa. Parece que está contenta y que obsequia a su alrededor con más sonrisas. Pero no todo el mundo sabe por qué...
Cuando Marta quiere sentirse sexy llama al chico nº 1 para salir. No necesita demasiado de él, le basta con que la pasee, la lleve a cenar y le diga lo guapa que está y lo interesante que es como mujer. Se toman unas copas, bailan al son de la música y luego hacen el amor. En realidad a ella no le interesa demasiado ese chico, pero los ratos que pasan juntos son divertidos y desenfadados; y de vez en cuando apetece soltarse el pelo.
Cuando Marta tiene ganas de enriquecerse como persona llama al chico nº 2. Hace algunas de las cosas que haría con su pareja: van al cine, a restaurantes, y pasan largos ratos charlando; parece que no existan horas suficientes para que se canse. Le gusta como hombre, sí, pero lo que más le fascina es lo que tiene dentro. Con él se siente muy relajada, sin presiones y no tiene ninguna prisa en acelerar las cosas. Cree que tienen una relación muy sana en la que se muestra tal y como es en presente.
Cuando Marta quiere ser la Marta más real llama al chico nº 3. Él lo conoce todo de ella y le gusta tal y como es. Pero hay dos motivos muy importantes por los que ella no puede enamorarse; y es que Marta es especialista en relaciones imposibles.
Por eso cuando la gente le dice que está muy guapa Marta sonríe. Porque nadie sabe que está jugando, que está repartiendo su ser entre tres, y que ellos creen ser únicos para ella cuando en realidad no es cierto. Porque Marta sabe que eso no se repetirá...
......pero parece que así su vida es mucho mejor.
......pero parece que así su vida es mucho mejor.
1 comentario:
es increible la facilidad con que relatas las trivialidades de la vida de una persona..dan ganas de seguir leyendo..es un tema fascinante para una novela..
Martha. ( pero no la del relato )
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